Kendall ha documentado y definido la postura ‘ideal’ e identificado tres tipos de cambios adaptativos. Las variantes clásicas posturales son la cifosis-lordosis, la postura “sway back” (pelvis torera) y la postura con curvas aplanadas. (Muscles – testing and function. 4th. Edition by Kendall, McCreary and Provance 1993).
Hace unos meses hice una breve exposición sobre el alineamiento ideal y la postura “torera” o “sway back”. En la presente entrada veremos como afecta a nuestra estructura.
Las características de alineamiento de esta postura errónea son las siguientes:
• Balanceo anterior de la pelvis.
• Pelvis neutral-posterior (retroversión).
• Aumento de la cifosis torácica.
• Aumento de la lordosis lumbar.
• Relativa extensión de cadera.
Las disfunciones más destacables de esta postura son:
• Musculatura oblicua del abdomen alargada e inhibida.
• Iliopsoas alargado e inhibido.
• Multífidos y extensores de tronco alargados e inhibidos.
• Glúteos inhibidos.
• Recto abdominal acortado o hiperactivo.
• Isquiotibiales acortados e hiperactivos.
• TFLs acortados e hiperactivos.
Debido a las características descritas anteriormente las personas con esta postura suelen agravar o provocar dolor durante la flexión lumbar en general: sedestación prolongada (conducción), al inclinarse flexionando la columna lumbar, bicicleta, colchones excesivamente blandos… y también en posiciones o movimientos en el límite de la extensión: bipedestación prolongada, caminar cuesta abajo, sostener o coger algo por encima de la cabeza…
Te propongo un ejercicio: colócate de pies, cierra los ojos y deja que tu “escáner” te informe de tu posición, abre los ojos y mírate en el espejo, si te identificas con los síntomas y esta posición puedes ser un torero!
Eneko Santano Morentin
Fisioterapeuta Ergoactiv Escuela de Espalda